Accesorios Metálicos paraCerramientos
Complementos esenciales para uniones seguras y acabados profesionales en cerramientos metálicos.
Complementos esenciales para uniones seguras y acabados profesionales en cerramientos metálicos.
Los accesorios metálicos para cerramientos complementan y optimizan la instalación de paneles y coberturas, garantizando mayor durabilidad, estanqueidad y un acabado profesional en cada proyecto. Fabricados en material aluzinc, estos componentes —como cumbreras, canaletas, canaletas friso y zócalos— ofrecen una excelente resistencia a la corrosión, larga vida útil y fácil mantenimiento, incluso en condiciones ambientales exigentes.
Su función principal es proteger las uniones, bordes y bases de las estructuras metálicas, además de mejorar la apariencia estética y el rendimiento general del sistema de cerramiento. Gracias a su precisión en el diseño y su compatibilidad con diversos tipos de paneles, estos accesorios son una solución integral y confiable para aplicaciones industriales, comerciales y residenciales.
Diseño a medida: Accesorios fabricados a la medida de su proyecto.
Desarrollo máximo: 1220 mm
Largo máximo: 3.00 m.
Material y norma: acero con recubrimiento Aluzinc conforme a ASTM A792 – AZ150 (55 % Al, 43.4 % Zn, 1.6 % Si).
Pintura: Exterior: 5 micras de primer epóxico + 20 micras de poliéster; Interior: 8 micras de primer epóxico
Colores disponibles: Natural, Ral 5002/5005, Ral 3002/3003, Ral 9003/9010, Ral 6002/6035, Ral 7040
Certificado de cálidad: ASTM A-792
La cumbrera es un accesorio metálico diseñado para cubrir y proteger la unión superior entre dos faldones de techos inclinados, garantizando la hermeticidad y un acabado estético uniforme. Fabricada en aluzinc —una aleación de aluminio, zinc y silicio—, ofrece una excelente resistencia a la corrosión, mayor durabilidad frente a la intemperie y una apariencia brillante que realza el aspecto del techo.
Su uso es indispensable en sistemas de coberturas metálicas y paneles termoaislantes, ya que evita filtraciones de agua y protege la estructura interior del techo. Además, su ligereza y fácil instalación la convierten en una solución práctica y de bajo mantenimiento, ideal para todo tipo de edificaciones industriales, comerciales y residenciales.
La canaleta es un accesorio metálico utilizado para el ordenamiento y protección del cableado eléctrico, de datos o de control en instalaciones industriales, comerciales y residenciales. Fabricada en aluzinc, ofrece una excelente resistencia a la corrosión, durabilidad y estabilidad estructural, incluso en ambientes de alta humedad o exposición prolongada.
Su diseño permite una distribución segura y organizada de los conductores, facilitando el mantenimiento y futuras ampliaciones del sistema. Además, su acabado metálico aporta una apariencia limpia y profesional, ideal para proyectos donde se requiere tanto funcionalidad como estética.
La canaleta friso es un accesorio metálico diseñado para cubrir y proteger las uniones entre paneles o revestimientos metálicos, proporcionando un acabado limpio, estético y funcional. Fabricada en aluzinc, combina la resistencia del acero con la protección del aluminio y el zinc, ofreciendo excelente durabilidad, alta resistencia a la corrosión y larga vida útil.
Se utiliza principalmente en cerramientos, fachadas y techos metálicos, donde contribuye a evitar filtraciones, mejorar la apariencia final y reforzar la estructura del sistema de cobertura. Su fácil instalación y bajo mantenimiento la convierten en una opción práctica y confiable para todo tipo de proyectos arquitectónicos e industriales.
El zócalo es un accesorio metálico utilizado para proteger la base de muros, cerramientos o paneles contra la humedad, golpes y desgaste por el contacto directo con el suelo. Fabricado en aluzinc, ofrece una excelente resistencia a la corrosión, alta durabilidad y un acabado uniforme, manteniendo la estética y funcionalidad de la estructura a lo largo del tiempo.
Su instalación se recomienda en edificaciones industriales, modulares y comerciales, donde actúa como una barrera de protección que evita la oxidación y el deterioro prematuro de los materiales, además de facilitar la limpieza y el mantenimiento en las zonas inferiores de los cerramientos.